De nuevo sucede esto:
de mañana, oscurecida,
el corazón no está en su puesto
sino en tu casa metida.
De buena gana te lo presto,
y es con el supuesto
que me vuelva la vida
cuando te manifiesto
que en mi eres sentida,
aunque tú me ames a escondidas,
pero no tengo repuesto
y esta vida compartida
tiene bajadas y subidas,
de deseos, lleno el cesto,
y de amor, partes heridas.
Pero viene l…