El siete de abril es cumpleaños de Donata . Donata es mi suegra y digo es, porque aunque ya falleció , su recuerdo es una lección que no se puede olvidar .
Donata fue educada para ser una reina , para ser millonaria y con un apellido compuesto por cuatro o cinco palabras. En resumen , se sentía parte de la aristocracia mas dorada que uno pueda imaginar . Sin embargo , ella no era feliz, porque la amargura opacaba la nobleza que había en su alma .
Cuando mi suegro se puso muy grave ( sufría una enfermedad degenerativa) , mi esposo y yo nos hicimos cargo de todo . Vivimos con mis suegros una buena temporada , pero Donata nunca estaba contenta. Todo le parecía mal y desaprobaba todo lo que hacíamos . Fue un tiempo muy difícil para nosotros y logré a duras penas mantener la armonía en la casa .
Aunque parezca curioso , durante este tiempo mis sueños o viajes astrales, estaban poblados de historias de la familia de mis suegros. Me enteré sin desearlo, de todos los pormenores de la familia . Conocí hasta los bisabuelos de mi esposo . Llegué a pensar , que eran muy interesantes todas estas historias , pero que nada tenían que ver conmigo . Luego con el tiempo comprendí, que aquellos seres, lo que buscaban era mi disposición, para aceptar y querer a mis suegros.
Luego de fallecer mi suegro, Donata fue diagnosticada con cáncer al estómago y eso fue terrible . Nunca he visto sufrir a una persona de esa manera y lo más triste , es que nos culpaba a nosotros de sus desgracias.
Donata pensaba que la vida había sido injusta con ella. Se casó con el hijo de un cónsul extranjero , vivió en la zona más elegante de Lima , tenía un hijo perfecto (así lo educó ella) . Pero no era feliz . . . porque nada resultó como ella esperaba . Es mas, yo diría que todo le resultó al revés . Durante su enfermedad pude conocerla mejor , llegué a entender el origen de esa amargura . Lo comprendí todo . . . La pobre Donata ya no quería ser feliz , le molestaba la felicidad ajena y créanme , casi logra contagiarnos a nosotros también.
Les cuento todo esto, porque gracias a estos difíciles momentos, hice un viaje , que mis Guias me ayudaron a recordar .
Entenderán que en esa época, vivía corriendo entre el hospital y mi casa . Casi no veía a mis hijos . Teníamos deudas hasta la coronilla ( el cáncer es una de las enfermedades más caras, aun teniendo un buen seguro) . Mi esposo trabajaba prácticamente el doble , así que tampoco podía verlo . Y entre estos apuros, un día mi suegra ingresó a emergencias .
Como no podía pasar a cuidados intensivos , salí a los jardines del hospital . Era una bonita y soleada tarde de primavera . Miré hacia el cielo y vi la luna. Me encantó la coincidencia del sol y la luna en un mismo cielo celeste y limpio de nubes.
Estaba tan agotada con la enfermedad de Donata, que no recordaba que en ese mes , se celebra en Lima una fiesta religiosa importante . Es el mes del Señor de los Milagros . Es una imagen del Cristo crucificado al que se le atribuye la curación de cualquier enfermedad .
Los jardines del hospital fueron adornados con toda clase de detalles para recibir al Señor de los Milagros, que llegaría unas tres horas mas tarde . Yo estaba sentada en una banca y sin darme cuenta estaba hablándole a Jesús. Le dije como bromeando ¨El único milagro que necesito es ir a la playa , ver el sol y la luna juntos y escuchar el canto del mar¨
Una enfermera me avisó que mi suegra ya estaba fuera de peligro y que esa noche estaría completamente dormida por los calmantes. Me recomendó que regresara a la casa a dormir , porque los días siguientes serían muy dolorosos para Donata y yo debería estar preparada.
Esa noche, cuando me fui a dormir , salí de mi cuerpo sin proponérmelo ( Cuando estamos muy cansados suele suceder) . Pero esta vez , uno de los Guias me condujo a la playa . Estaba tan contenta de estar allí . Sentía claramente el movimiento de las olas y el olor salado del mar . El Guía me sacó de mi distracción y me dijo
¿ Qué te falta para ser feliz?
Cuando lo vi me pareció conocido (es que mi pobre Guía me acompañaba siempre en la clandestinidad , porque yo le había dicho que no quería verlo) , pero no supe que responder . Le conté sobre la enfermedad de mi suegra y lo impotente que me sentía . Que deseaba hacerla feliz pero ella no se dejaba amar.
El Guía se paró detrás mio , hizo que sus manos y las mías coincidieran y sujetándolas , con la mano derecha señaló el sol y con la mano izquierda señaló la luna . Me reí porque recordé que ese era mi deseo. El con mucha dulzura dijo
¨tienes el sol y la luna en tus manos , absolutamente todo es tuyo. Pero tu no lo quieres aceptar ¨
Dejé de reírme y le respondí sin pensar ,
Yo solo deseo ser el sol no me gusta la luna , no me gusta la noche , no me gusta mi noche .
El soltó mis manos y me abrazó diciendo :
La noche no existe . La luna es un gran espejo que refleja la luz del sol . . y antes de que el terminara agregué :
pero la luna no es el sol, sólo es un espejo , no tiene luz propia .
Entonces el cogió mi mano y me dijo : tu si tienes luz propia . Al mirar mi mano brillaba , cuando la comparé con la otra mano , me di cuenta que todo mi cuerpo brillaba . El Guía volvió a abrazarme y dijo : Si tu luz no te convence recuerda que significa tu nombre . El me hizo recordar que cuando era niña , me explicó que mi nombre era una palabra muy antigua , que venia de Fenicia y significaba Amanecer.
Le respondí repitiendo lo que el me había enseñado ¨no debes temerle a la noche porque depuse de la noche llega el amanecer . Yo soy el amanecer , donde la luz y la oscuridad se encuentran , cuando el sol se levanta con mas fuerza para disipar la noche , soy el eterno triunfo de la vida sobre la muerte¨
Me sentía muy bien , estaba cerca del mar , con el sol , con la luna y un amigo que me recordó quien era. No necesitaba mas .
El me dijo que tenía que regresar porque estaba muy cansada. Le pregunté si podía volver y el respondió que volvería si yo lo deseaba . Pero al día siguiente no recordé nada. Sin embargo si desarrollé un poco de madurez para enfrentar esos momentos. Volví a sonreír, algo que casi había olvidado y lo más importante es que aprendí a amar a Donata .
Cuando Donata falleció , me sentí tranquila y nunca la vi en mis sueños. Esa es la señal de que ella está muy bien y que por fin es feliz.
Rossana Ysabel
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